Midiendo mis palabras, con escuadra y cartabón.
Para lograr que sean precisas y sin ninguna equivocación.
Deseándote y queriéndote desde siempre he estado.
¿Qué pedir sino que te des cuenta?
¿Qué añorar sino tu amor?
Pero lo nuestro tuvo un comienzo, y el final ya sucedió.
No hay comentarios:
Publicar un comentario